Hay muchos tipos de masajes y cada uno tiene sus propios beneficios, pero el drenaje linfático es uno de los mejores servicios que puedes ofrecer en tu estética. Si quieres aprender a cómo hacer drenaje linfático, sigue leyendo.
Estos masajes tienen muy buena reputación y se la deben a la capacidad que tienen de limpiar el cuerpo, específicamente el sistema linfático, del líquido que lo compone. Por eso, si estás buscando una manera de elevar la experiencia de tus clientes y atraer a nuevos consumidores, puedes considerar agregar el masaje de drenaje linfático en tu lista de servicios.
¿Qué es el sistema linfático y por qué es bueno drenarlo?
Antes de comenzar con la práctica nos debemos adentrar un poco en la teoría detrás de este masaje, para poder convertirnos en expertos de cómo hacer drenaje linfático.
El sistema linfático es uno de los más importantes en el cuerpo humano. Su principal tarea es desechar sustancias que no son necesarias o son dañinas para el organismo. También contribuye a mantener la salud del sistema circulatorio y a crear células cuya función es defender el cuerpo ante amenazas.
Cuando el sistema linfático tiene algún problema o no ha sido drenado puede crear un edema, una acumulación de líquido propio del sistema linfático. Es por ello que se realizan masajes para drenar el sistema linfático, con el objetivo de evitar que ocurran edemas y liberar al sistema del líquido que produce, denominado linfa.
Drenaje linfático manual: cómo se hace
Aprender a hacer un masaje de drenaje linfático paso a paso no es complicado. Estos son los pasos que debes seguir:
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Primero, debes posicionar las piernas de tu cliente una encima de la otra. Luego, en la pierna que está encima debes masajear suavemente en el lado exterior desde la rodilla hacia arriba a la cadera. Puedes hacer esto por unos 3 minutos y luego cambiar a la otra pierna, donde repetirás el movimiento.
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Luego pasa a los brazos, para esto deberás elevar el brazo de tu cliente a tal forma que haga una forma de “L”. Ahora, puedes repetir el mismo movimiento que hiciste en las piernas, una especie de círculo, desde el hombro hasta la muñeca. Repite por aproximadamente 1 minuto y 30 segundos, y después cambia de brazo.
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Ahora puedes pasar al cuello de tu cliente. Coloca las manos justo bajo las orejas y comienza a repetir el movimiento que has hecho hasta ahora. Hazlo por aproximadamente un minuto, y después puedes pasar a la próxima zona.
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La última zona es la ingle. Deberás colocar cada mano de un lado de la ingle y repetir el movimiento circular por unos 3 minutos.
Siguiendo estos 4 simples pasos podrás darle a tu cliente un increíble masaje, que más que ser relajante, será muy beneficioso para su salud. Pero si quieres adentrarte un poco más en el tema y conocer otras zonas que pueden beneficiarse el masaje, te invitamos a ver este video:
Ventajas y efectos del drenaje linfático
Los efectos y beneficios del drenaje linfático son muy numerosos, pero los más conocidos y buscados por clientes son los siguientes:
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Reducir la retención de líquido en el cuerpo.
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Ayudar con la eliminación de celulitis.
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Son sumamente relajantes, por lo que tienen un efecto positivo en el humor.
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Ayudar al sistema circulatorio y evitar afecciones como las varices.
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Tienen un efecto positivo en el sistema inmune.
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Prevenir o eliminar edemas, los cuales pueden tener efectos negativos en la salud.
Si necesitas más razones para empezar a ofrecer este servicio en tu estética, todos sus beneficios serán más que suficientes; sin contar además que este tratamiento atraerá a muchos nuevos clientes que estén buscando drenajes linfáticos.
Ahora que tienes todos los pasos de cómo hacer un drenaje linfático, no pierdas tiempo y comienza a practicarlo.
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