¿Cuáles son las funciones de un recepcionista de una estética?

Los recepcionistas dan la bienvenida a los clientes u otro tipo de visitantes. Sentados o de pie tras un escritorio o mostrador, reciben a la gente cuando llega, y atienden las preguntas de los visitantes. También pueden tener otras funciones, por ejemplo, realizar el tratamiento de textos, concertar citas, preparar facturas, cobrar y responder a solicitudes de información hechas por teléfono o correo electrónico.

Como su nombre lo indica, un recepcionista está a cargo de recibir y dar la bienvenida a los clientes, proveedores o mensajeros que entren al establecimiento; de atender las solicitudes para citas y consultas por correo electrónico o teléfono y, por supuesto, mantener actualizada y en orden la libreta de citas y la base de datos de los clientes que visitan el salón.

Si eres un aspirante al puesto de recepcionista en una estética y quieres prepararte debidamente para el cargo, este artículo es para ti. Hoy te diremos algunas de las actividades y responsabilidades que tienen los recepcionistas en una estética; además de algunos tips para desempeñarte al máximo en el cargo.

Responsabilidades

Como mencionamos antes, algunas de las responsabilidades del recepcionista de un salón incluye: recibir a los clientes en su llegada, responder a sus preguntas sobre los servicios, ya sea por teléfono, correo electrónico o presencial y realizar transacciones. Para desempeñarte bien en el puesto, es importante que seas una persona organizada y con un gran sentido de atención al cliente, es decir, ser cordial y amable con estos; aún en las horas más demandantes.

Algunas otras responsabilidades del recepcionista son:

Dar una cordial bienvenida a los clientes que entren al salón, acompañarlos al tocador correspondiente e informar de su llegada al estilista asignado.
Reservar y confirmar citas por teléfono o correo electrónico.
Procesar transacciones (en efectivo y tarjetas de crédito) y entregar comprobantes de pago.
Ofrecer bebidas y conversar con los clientes que están en la sala de espera.
Dar la bienvenida a los clientes que entran sin cita, responder preguntas sobre los servicios y programar citas en función de la disponibilidad.
Informar a los clientes sobre nuevos servicios y descuentos.
Vender servicios y productos complementarios mediante folletos informativos y tarjetas de regalo cuando corresponda.
Actualizar las fichas de los clientes con los datos de contacto y pago, las citas y los servicios ofrecidos.
Gestionar el centro de atención telefónica.
Mantener ordenada la zona de recepción.
Realizar los pedidos de tarjetas de visita, folletos de material de oficina cuando sea necesario.

Requisitos

Algunos requerimientos que podrías conseguir en las ofertas de trabajo para recepcionistas de estética podrían ser los siguientes:

Experiencia profesional demostrable como recepcionista de salón, recepcionista general o puesto similar. No siempre este requisito es excluyente.

Experiencia práctica en el manejo del equipo de oficina, como impresoras y sistemas de TPV.

Familiaridad con el procesamiento de transacciones.

Excelentes dotes de comunicación (verbal, por teléfono y por correo electrónico) con una actitud orientada a la atención al cliente.

Excelentes aptitudes para la organización y el mantenimiento de registros.

Capacidad para mantener la calma en situaciones estresantes.

Título de educación secundaria.

Tips para recepcionistas de estética

Ser una persona organizada es clave para el día a día de un recepcionista. Tener todo organizado y a la mano siempre será un plus para cualquier tipo de trabajo, en especial el de recepcionista. Puedes ayudarte mediante algunas apps o softwares de gestión de agenda y citas online. Las citas hechas por este medio se agregan automáticamente a tu calendario y podrás tener todo mucho más organizado y bajo control.

Tener siempre a la mano toda la información de tus clientes y proveedores. Toda esta información es indispensable para gestionar citas y pedidos, así como para resolver cualquier eventualidad y preguntas de los clientes.

Siempre dar una buena primera impresión. Tu presentación, postura, tono de voz, educación y cordialidad son muy importantes para que el cliente perciba un aire de profesionalidad en ti, además de transmitir confianza al cliente y hacerlo sentir en el lugar adecuado.

Cuidar tu imagen personal. Cuida tu higiene, tu cabello, uñas, cara, lleva siempre de manera adecuada y pulcra tu uniforme. El recepcionista de una estética es la cara de esta, por esta razón, siempre debe estar perfectamente arreglado y perfecto.

Cuidar tu tono de voz al atender a los clientes. Deberás ser dulce, agradable, simpático y cordial. Esto hará que los clientes se sientan bien atendidos y en un lugar agradable.

Ser una persona proactiva. Ofrece tu ayuda a todo el que puedas, sean clientes, proveedores o tus mismos compañeros. Te lo agradecerán y te tendrán siempre como una persona dedicada y generosa.

Ser detallista. Esto ayudará a clientes y proveedores a que todo quede bien claro y evitará posibles problemas de comunicación.

Estar especialmente atento al momento del cobro. Al momento de manejar el dinero y las cuentas es necesario que prestes atención a cada detalle para que nada se te escape. Manejar el dinero de los demás es una tarea delicada y no quieres problemas al respecto. Si cuentas con un buen sistema de facturación, entonces ya casi todo el trabajo está hecho.

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