La psicología es una rama tan diversa y compleja del saber, que incluso los principales teóricos de la misma no han podido ponerse de acuerdo. ¿Es acaso una ciencia? ¿Es un método? ¿Cuál es su objeto de estudio? ¿Por qué no todo psicólogo es a su vez un psicoterapeuta? Son tan solo algunas de las decenas de interrogantes que han surgido con la evolución de la misma.
Podemos hablar de psicología social y cómo se forma, desenvuelve y evoluciona una comunidad. O bien la psicología escolar y los fenómenos involucrados en el aprendizaje. Podríamos también conversar acerca de la psicología del mercado o consumo, o qué tan efectiva es la psicoterapia Gestalt para tratar desórdenes alimenticios.
Es aquí precisamente donde reside la belleza de la psicología y su crisol de posibilidades. Como seres humanos que somos, no podemos encasillar o descomponer a cada persona como solo un cúmulo de características.
El ser humano puede analizarse desde un sinfín de vertientes, todo dependiendo del objetivo tras dicho análisis. Es por eso que, para un psicólogo industrial, su curso de acción será completamente distinto al de un psicoterapeuta de orientación cognitivo-conductual.
Entonces, ¿Qué es lo que define o delimita a la psicología? ¿Un psicólogo es acaso un consejero? ¿Es el ‘doctor de la mente’? ¿Existe esta ‘mente’? Para la mayoría de las personas, psicólogo y psicoterapeuta son sinónimos, cosa que difiere de la realidad y el ejercicio profesional.
Sin embargo, incluso ante la infinita variedad de teorías, orientaciones, propósitos y objetos de estudio, la gran mayoría de ramas de psicología cuentan con un cúmulo común de herramientas. En este artículo, conversaremos acerca de las más comunes.
Herramientas más comunes utilizadas por la psicología
Observación
La psicología nace como una ciencia de observación. Desde el primer laboratorio de reflexología de Wilhelm Wundt, todo se trató acerca de la observación del ser humano ante una serie de condiciones determinadas.
Psicólogos sociales observarán una comunidad. Psicólogos industriales, el ambiente laboral. Un psicoanalista observará a su paciente en función de su marco teórico. Por lo cual la psicología sin observación sería simplemente inexistente.
Entrevista
El psicólogo no podrá - casi nunca - deslindarse de la entrevista. Salvo en casos puntuales de psicología experimental, se estará en constante retroalimentación con el sujeto de estudio o paciente, recopilando tanta información como sea posible.
Ya sea para delimitar la población de un estudio o bien para realizar psicoterapia, el psicólogo tiene que ser un entrevistador experto. Ahí, la escucha activa y la habilidad de realizar preguntas abiertas serán su mejor aliado.
Registro
En este mismo sentido, queda en evidencia que una observación sin registro es fútil. El psicólogo, fuera cual fuere su orientación o propósito, deberá llevar un registro meticuloso de sus observaciones.
El registro servirá para establecer líneas de base, plantear hipótesis, revisar la evolución de una comunidad, constructo, paciente o grupo de estudio; y abrirá puertas a investigaciones en el futuro.
Investigación
En consonancia con el último punto, la investigación es, quizás, el pilar fundamental de la psicología. Desde la observación hacia la formulación de hipótesis hasta su comprobación empírica, la investigación permite el nacimiento de nuevas vertientes de la psicología.
Asimismo, la investigación constante permite el desarrollo de técnicas para el potenciamiento del desarrollo y desenvolvimiento humano, así como la comprobación de la efectividad de las herramientas terapéuticas.
Diagnóstico
Si bien no todas las corrientes de la psicología - como por ejemplo, la psicología humanista y la psicología positiva - no creen en el diagnóstico tradicional como tal, en su gran mayoría la psicología se vale de esta herramienta para determinar su curso de acción.
Un diagnóstico acertado y efectivo servirá para atender las necesidades de la comunidad, público objetivo, paciente o cliente en cuestión. Para esto, la observación sistemática y meticulosa será clave.
Psicoterapia
Nuevamente es fundamental hacer la distinción entre psicólogo y psicoterapeuta. Todos los psicoterapeutas deben ser psicólogos originalmente, pero no al revés. Esto se debe a que se trata de una formación adicional que implica mayor tiempo de estudio y - sobre todo - horas de experiencia de psicoterapia.
El psicoterapeuta se posicionará desde la vertiente de la psicología de su preferencia, entendiendo un objeto de estudio, motivo de consulta, o paciente desde la misma. Existen diversas ramas de psicoterapia, siendo las más comunes el psicoanálisis, el enfoque cognitivo-conductual, conductismo, psicoterapia gestalt, psicodrama y psicología humanista.
En conclusión podemos inferir que la psicología es un área del saber que está aún muy lejos de ser delimitado o estandarizado. Quizás, discutir en torno a qué debería ser, cómo debería estudiarse, y qué técnicas tendría que aplicarse sea tan inútil como poco práctico a estas alturas de su historia.
Es por eso que lo primero que debe saberse antes de decantarse por los servicios de un psicólogo es el objetivo por el cual será contratado, así como los resultados que se espera obtener después de su intervención.
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